México (7 de julio).- Ser malo le ha traído beneficios a Sebastián Ferrat, actor mexicano que asegura vivir uno de los mejores momentos en su trayectoria artística. Desde hace un par de meses se ha encargado de dar vida a Aurelio Casillas “El marcado”, uno de los villanos más odiados y respetados de “El señor de los cielos”.

El actor nacido en Mexicali, jamás imaginó que tras integrarse a la tercera temporada de esta producción —encabezada por Telemundo— su vida profesional adquiriría retos que lo impulsan a consagrarse como uno de los intérpretes con mayor versatilidad cuando la cámara está lista para enfocar.

“Encarnar a Juan Antonio ‘El marcado’ ha sido un deleite en los foros de grabación”, puntualiza Ferrat, pero confiesa que también representa un esfuerzo físico y emocional para trabajar con cautela y respeto el tema central de “El Señor de los cielos”, que pone de manifiesto la realidad del crimen organizado, pero coloreada con personajes y situaciones ficticias.

La caballerosidad de Sebastián desaparece cuando “El Marcado” se hace presente. “Es un desgraciado” –risas- comenta al asegurar que adueñarse de la maldad y la violencia de este personaje ha sido divertido en términos de la fuerza e impacto que tiene en la historia, en la que comparte créditos con Rafael Amaya, Fernanda Castillo, Carmen Aub y Mauricio Ochmann.

“La experiencia ha sido buena y el impacto con el público también. La gente está reaccionando a mi personaje: lo odian, pero al mismo tiempo lo quieren, aunque no tiene nada que quererle a ‘El marcado’, pero al público le gustan los villanos y por fortuna me toca interpretarlo”.

Abierto al futuro

Aunque la incertidumbre sobre la permanencia de “El marcado” en las próximas temporadas de “El señor de los cielos” también es un misterio para el mismo Sebastián, el actor no descartaría la oportunidad de seguir dentro de la historia, ni tampoco de rechazar otras propuestas laborales que le permitan alternar su agenda.

Aunque su función como director de la escuela de actuación “Taller Actoral Tu Escenario” en Chicago y Miami ya terminó hace un par de meses, Sebastián Ferrat considera que esta vocación de docencia hacia los nuevos talentos es una actividad que quiere mantener viva en un futuro.

“Dar clases es lo que me encanta cuando no estoy actuando, si regreso a hacerlo ya sería por mi cuenta ya sea en México o Estados Unidos, ahora quisiera impartir cursos intensivos de 15 días o algo así para poder seguir actuando”.

Sin miedo a nada

Desde el “casting”, Sebastián sabía qué tipo de maldades haría “El marcado” y del ritmo de trabajo que esta actuación conllevaría. Tal ha sido el interés por Ferrat de ofrecer una excelente interpretación que incluso ha tenido un entrenamiento en combates y manejo de armas de salva para brindarle una mayor credibilidad al personaje.

“No es un personaje basado en nadie, pero tiene tintes de realidad y comencé a buscar cosas relacionadas con ese tipo de personajes a través de documentales, entrevistas. Comencé a armarlo de la mano del director y del escritor. Nos mandaron a entrenamiento con armas, a coreografiar golpes, hay una adrenalina que es inevitable no sentirla en esta experiencia, ha sido divertido y gratificante”.

Sebastián Ferrat considera que su encuentro con “El marcado” significa un antes y un después en su andar actoral, pues los próximos personajes que toquen a su puerta deberán contar con una propuesta arriesgada y explosiva que lo mantengan con hambre de seguir cumpliendo retos.

“Lo más divertido de este personaje es que puede inspirar miedo”, expresa el intérprete y a la par que recuerda los momentos complicados y delicados que “El marcado” le ha hecho experimentar cuando las escenas de violencia son necesarias en la historia, como lo vivió con la actriz Carmen Aub, quien da vida “Rutila Casillas” y que es agredida por este villano.

“Esa escena ha sido de las más complejas porque conocí a Carmen 20 minutos antes de grabar. Afortunadamente nos entendimos bien, tenemos buena química y un respeto laboral. Al terminar la escena lo primero que pensé es que ella estuviera bien, porque al estar en escena permites que el personaje aparezca, tienes que controlarlo para trasmitir esa maldad que tiene”.

Sabiendo el argumento tan rojo que “El señor de los cielos” tiene y ha logrado captar a más de dos millones de televidentes en cada temporada, Sebastián Ferrat revela que intenta separar la ficción de su personaje de la realidad temática que interpreta.

“Me empapo solamente del personaje y del libreto. Al terminar la jornada laboral trato de ver otro tipo de series, de distraerme, con cosas que no tengan nada que ver con el tema, para no contaminar al personaje y no agregarle cosas que no le corresponden”.

Marcando camino

Sebastián Ferrat comenzó sus estudios de actuación a finales de la década del 90 en el Instituto de Cultura de Baja California y posteriormente se integró al taller de televisión para actores avanzados en el Centro de Educación Artística (CEA); desde entonces ha sido un intérprete activo no sólo en la pantalla chica, en teatro también ha encontrado la oportunidad de manifestar su talento.

A lo largo de su carrera ha integrado elencos en “Lo que callamos las mujeres”, “A cada quien su santo” y participaciones elementales en telenovelas como “Amar de nuevo”, “Montecristo”, “Mientras haya vida”, “Se busca un hombre” y “Entre el amor y el deseo”.